Nueva York, 15 ago (EFE).- Las acciones de General Electric se desplomaban este jueves cerca de un 14 % en Wall Street después de que el analista Harry Markopolos, quien en su día denunció la gran estafa de Bernie Maddoff, asegurara que las cuentas presentadas por el gigante estadounidense son falsas y que se enfrenta a la quiebra.
Markopolos publicó un informe que dice reflejar un enorme fraude de la compañía en la página web www.GEfraud.com, en la que describe un engaño «mayor que el de Enron», uno de los mayores escándalos financieros de la historia.
«Mi equipo se ha pasado 7 meses analizando la contabilidad de General Electric y creemos que el fraude de 38.000 dólares que nos hemos encontrado es sólo la punta del iceberg», asegura el experto en un informe de 175 páginas, que añade que el conglomerado tiene un largo historial de cuentas fraudulentas.
Los inicios de la estafa datarían de 1995, cuando la empresa estaba dirigida por Jack Welch, y se centraría en el departamento de seguros de cuidados a largo plazo, en el que el año pasado se tuvieron que inyectar 15.000 millones de dólares.
Con el análisis de los documentos presentados por las contrapartes de General Electric en este negocio, Markopolos afirma que General Electric está registrando enormes pérdidas que vaticina sólo incrementarán con el tiempo.
Además, también encuentra anomalías en su contabilidad en Baker Hughes, su negocio dedicado a gas y petróleo.
Por su parte, General Electric aseguró en un comunicado que las «afirmaciones de Markopolos no tienen base».
«La compañía nunca se ha reunido, hablado o entrado en contacto con Markopolos y estamos muy decepcionados de que un individuo sin conocimientos directos de General Electric elija presentar unas acusaciones tan graves y no corroboradas», señaló la compañía.
«General Electric opera con los mayores niveles de integridad y respalda sus informes financieros», agregó.
Markopolos es un experto en contabilidad que se hizo conocido tras apuntar las irregularidades en la estrategia de inversión de Madoff por los contantes y elevados beneficios para sus clientes de los que informaba, que el analista decía eran imposible de obtener.
Aunque en un principio sus denuncias fueron ignoradas, con la crisis económica de 2008 y la retirada de buena parte de los fondos se supo que, como había sospechado Markopolos, las inversiones de Madoff no habían sido reales y que se trataba de una pirámide financiera con la que estafó cerca de 65.000 millones de dólares. EFE